En la cámara del sector consideran que el precio actual indica un atraso en la actualización impositiva que se propuso el Gobierno. En la Ciudad, sigue cayendo la venta. En abril se estima que estuvo entre el 2 y el 3% abajo
La “primaverita” de la nafta: tras bajar el precio, para los estacioneros podría subir 16%
La venta de combustible en la Ciudad cayó entre un 2 y 3 por ciento en las últimas semanas / César Santoro
El combustible bajó un 4 por ciento y eso alegra a quienes tienen que cargar, pero del otro lado de la manguera del surtidor, en la Federación de Entidades de Combustible de la Provincia piensan que así se agudiza un atraso de precio que ronda el 16 por ciento.
La medida del Gobierno Nacional se dio en el marco de una fuerte retracción de las ventas, que ya lleva 15 meses.
Con esta disposición -según se indicó- se busca sostener la estabilidad de precios en un contexto de desaceleración inflacionaria y adecuar la política comercial a la evolución de variables económicas locales e internacionales.
Así, por segunda vez en el último año, YPF bajó el valor del combustible, producto de la caída del precio internacional del crudo Brent y a factores como la cotización del tipo de cambio, la carga impositiva vigente y el precio de los biocombustibles, de acuerdo a lo que se detalló desde la petrolera nacional.
Por su parte, el Gobierno Nacional postergó la actualización prevista de los impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC).
Juan Carlos Basílico, presidente de la Federación de Entidades de Combustible de la Provincia de Buenos Aires, le dijo a este diario que la rebaja deriva de una nueva postergación de la suba impositiva mensual que se viene aplicando tras un parate aplicado en el gobierno anterior.
