La explosión de un depósito que funcionó como Estación de Servicio, impulsó una batería de inspecciones en todo el país.
Las Estaciones de Servicio enfrentan más controles y requisitos tras el siniestro de La Plata
El depósito de electrodomésticos incendiado, en el pasado fue una Estación de Servicio
Por Redacción Surtidores
El incidente ocurrido en julio pasado en La Plata, donde un depósito de electrodomésticos —que en el pasado había sido una Estación de Servicio— explotó y se incendió, dejó más que daños materiales: reactivó inspecciones en cadena sobre las bocas de expendio país. Según un relevamiento efectuado por este medio, muchos estacioneros se encontraron con controles sorpresivos que pusieron la lupa en aspectos técnicos, ambientales y de seguridad que no siempre están en la primera línea de sus preocupaciones diarias.
En el plano nacional, la Secretaría de Energía exige una serie de medidas obligatorias para operar, como las auditorías de seguridad que incluyen la verificación de diseño, funcionamiento, planes de contingencia y documentación técnica; las pruebas periódicas de hermeticidad de tanques y cañerías, cuya frecuencia depende de la antigüedad de las instalaciones; y el cumplimiento de la Resolución 1102/2004.
El incendio de un edificio donde había funcionado una Estación de Servicio reavivó la importancia de planificar el cierre y su posterior reconversión
Tras el siniestro en un espacio que décadas atrás funcionó como expendedora de combustibles en La Plata, especialistas del sector remarcaron la necesidad de continuar fortaleciendo los procedimientos de remediación de suelos y retiro de instalaciones subterráneas.
A esto se suma la normativa más reciente, como la Resolución 147/2025, que regula el autodespacho y obliga a un certificado de seguridad adicional para las estaciones que habiliten la carga por parte de los usuarios. También son de cumplimiento obligatorio las disposiciones de la Ley 19.587 y su Decreto reglamentario 351/79, que abarcan desde los planes de evacuación y simulacros hasta la dotación de matafuegos, tambores con absorbente, baldes y linternas intrínsecamente seguras.
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial cumple un rol técnico central en este esquema, actuando como organismo de inspección y certificación en marcos regulatorios definidos por Energía y otros ministerios, verificando competencias y estándares industriales.
En este sentido, los ingenieros Carlos Cozzolino y Marcelo Pontati, asesores en Seguridad e Higiene de la Federación de Entidades de Combustibles, recomendaron a los expendedores “prestar especial atención a los vencimientos de auditorías y pruebas, verificar que los planos conforme a obra coincidan con la realidad de la instalación, mantener completos y operativos todos los elementos de seguridad, y asesorarse periódicamente sobre los cambios normativos”.
Capacitación: cómo actuar ante el incendio de un vehículo en la playa de la Estación de Servicio
El caso reciente en Entre Ríos reabre el debate sobre las prácticas seguras en situaciones críticas y la capacitación del personal.
Ambos expertos subrayaron que las exigencias no son uniformes: cada provincia y municipio puede sumar requerimientos adicionales en materia de impacto ambiental, habilitación comercial, horarios o ruidos, lo que obliga a un seguimiento constante de las disposiciones locales para evitar sanciones y prevenir riesgos.
Finalmente señalaron: “La prevención no se limita a cumplir con la normativa nacional, sino que también exige un control riguroso de los pasivos ambientales, la documentación histórica y las condiciones físicas de todos los componentes de la estación, activos o fuera de servicio. Una revisión interna periódica es la mejor defensa para no llevarse sorpresas en la próxima inspección”.