Decreto 46/2025
La nueva modalidad para la carga de naftas en el país por el momento ha generado incertidumbre. El periodista especializado Pablo Roma analizó la iniciativa en el programa Sin Verso de Ciudadano News.
Por Ciudadano.News
La nueva modalidad de autoservicio de combustibles en Argentina por el momento no está del todo clara y ha generado más dudas que certezas tanto en el sector estacionero como en los consumidores que aún no saben si accederán a productos con precios diferenciados, tal como sostiene el Gobierno que sucederá.
Así lo consideró Pablo Roma, periodista especializado en combustibles, en el programa Sin Verso, de Ciudadano.News, quien admitió que «es difícil tener el precio diferenciado entre un surtidor y otro«.
«Si bien cada uno puede poner un precio o más barato que otro, no es un supermercado. Podrías tener otra estación a unas cinco cuadras con unos centavos menos», apuntó.
El Gobierno nacional autorizó el «autodespacho» de combustible en todas las estaciones de servicio del país, una medida que había sido adelantada por el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger. La oficialización se produjo a través del Decreto 46/2025, publicado en el Boletín Oficial. No obstante, el decreto choca con leyes provinciales que exigen que la carga de combustible se haga por personal capacitado.

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«Además, las petroleras proponen precios sugeridos que si no son respetados podría haber problemas. En Mendoza hay una estación en Luján de Cuyo que es autoservicio que es propiedad de Omar De Marchi, hoy parte del directorio de Aerolíneas Argentinas», repasó.
Y Romá admitió que «lo que no se está hablando es como será la competencia un poco más adelante. Porque hay detalles en el decreto de los que no se habla. El estacionero independiente que tiene sus gastos al día, que ganan bien, pero que tienen un negocio familiar, sentirá como más difícil invertir unos 33 mil dólares para ingresar al sistema de autoservicio«.
«Comparando la venta de medicamentos en los kioskos, está bien la liberación, pero habría que ver hasta dónde se permiten nuevas maneras de vender combustibles. Por lo que vemos todos los días, hoy estamos ante la duda de que se podrían perder puestos de trabajo, pero aún no está del todo claro el decreto que habilita ciertos horarios para ese tipo de expendio«, reflexionó.
Y concluyó: «Los estacioneros están viendo a la iniciativa como una herramienta más que tienen las estaciones y los clientes para el expendio de combustible. Esto va a requerir de cambios culturales por parte de los consumidores. Las experiencias que hay muestran que su uso depende del rango etario. Los más jóvenes son más propensos al autoconsumo, pero la gente de más edad prefiere el expendio común«.
