Luego de que el desabastecimiento de combustibles se hiciera notar en todo el país y ciertos sectores de la política, acusaran a las estaciones de servicio de no querer vener para esperar que suban los precios al surtidor, el Secretario General de la CGT y titular del gremio de playeros,acusó directamente a las petroleras de “cagarse en la gente”.

En medio de la creciente preocupación por la escasez de combustibles en todo el país, el cotitular de la CGT y secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, Carlos Acuña, ha lanzado fuertes acusaciones contra las empresas petroleras, incluyendo a YPF. Su pronunciamiento no solo arroja luz sobre las causas del desabastecimiento, sino que también genera un llamado de atención a las petroleras por su presunta especulación.

“Las petroleras piden un aumento del 20% en los precios, y lo hacen porque les conviene exportar, sin importarles los argentinos que trabajan incansablemente todos los días. Están especulando con la situación”, afirmó Acuña en una conversación con AM750.

Estas declaraciones del líder gremial se producen poco después de que el Gobierno nacional anunciara la importación de combustible como medida para garantizar el abastecimiento y mantener los precios, al menos hasta después de la segunda vuelta electoral.

Carlos Acuña no escatimó críticas y vinculó estas acciones con un intento de desprestigiar al Gobierno en un momento crítico. “Fíjense en la cronología de los hechos, esto sucede justo antes de las elecciones, y está destinado a dañar aún más la imagen del Gobierno, que ya ha sufrido bastante desprestigio y mala suerte. Además, la falta de combustible perjudica tanto a las pequeñas y medianas empresas como al pueblo argentino”, subrayó Acuña en Toma y Daca.

El líder sindical también se mostró perplejo por el hecho de que las petroleras no hayan advertido con anterioridad sobre la posibilidad de desabastecimiento, y aseguró que las empresas refinadoras son plenamente conscientes de que un aumento en el precio del combustible afectaría al conjunto de la economía. “A ellas les conviene exportar”, insistió, destacando que el problema no radica en el consumo interno.

Respecto a la posibilidad de que se lleve a cabo una medida de fuerza en el sector, Acuña dejó abierta la puerta: “Puede haber un paro, puede suceder cualquier cosa, porque esto no afecta solo a los trabajadores, sino también a las pequeñas y medianas empresas”, advirtió el dirigente de la CGT cuando se le consultó sobre la respuesta del gremio ante esta situación conflictiva.

Carlos Acuña también compartió detalles de una conversación que mantuvo con el ministro de Economía y candidato a presidente, Sergio Massa, donde ambos coincidieron en calificar las acciones de las empresas refinadoras como un “boicot”.

Finalmente, en cuanto al balotaje electoral, Acuña afirmó: “La gente ya ha hecho su elección, y si algunos líderes creen que pueden llevarla en otra dirección, están equivocados”.

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